Y no pasa nada. Como tengo una edad, hace tiempo que aprendí que debo respetarme, y simplemente no me apetecía publicar nada. No es “burnout" ni cosas modernas, es depresión y es más vieja que el cagar.
🎙 Para aligerar un poco esto, te he hecho un audio
Contenidos para artistas
En internet hay de todo, y en los últimos años han proliferado muchísimo los contenidos para artistas y personas que quieren aprender a dibujar, pintar, tocar un instrumento o ser más creativas en general, lo cual es maravilloso y demuestran el poder de la red.
Por eso mi intención en La Inconformista no es ofrecer más de lo mismo, sino hablar de mi propia experiencia como artista, guionista o creativo para quien le pueda servir.
Y hay partes de mi experiencia que son incómodas, no son alegres, no venden, no se solucionan, ni tienen nada de glamour. Una de las peores es la depresión.
No me refiero al “bloqueo del escritor” o al “miedo a la hoja en blanco” o al “burnout”. Me refiero a cosas chungas que también existen en la vida real.
Yo no soy Marco Aurelio
Verás: a veces me deprime el mundo.
El mundo de los humanos, me refiero, porque a menudo se nos olvida de que en el mundo hay más cosas aparte de personas, porque somos así de inconscientes (o egocéntricos).
…Y entonces pierdo la esperanza.
Ahora no voy a ahondar en lo de la depresión porque sé que a la gente le incomoda leer de cosas desagradables, especialmente hoy en día donde todo tiene que ser alegría, éxito, salud, hacerte rico y disfrutar. Pero sí te diré que lo de que a veces el mundo me entristezca tiene en parte una raíz temperamental –genética– y otra parte circunstancial –de cosas que suceden a mi alrededor–.
Ambas son incontrolables, por mucho que lea filosofía o que me haga el estoico como si fuera Marco Aurelio.
Lamento decir que muchas veces los filósofos se equivocan, que se creen muy listos (y a menudo lo son), pero que hay temas que se les escapan y harían bien en reconocerlo; no pasa nada y sería una muestra de madurez.
Consejo de hermano mayor:
Si no estás bien o pasas un mal momento, para y piensa si realmente puedes solucionarlo tú solo; si no es así, busca ayuda profesional (psicólogos colegiados de verdad) o consulta al médico.
Hay que ir con muchísimo cuidado con la moda del estoicismo, de todo el que te diga que cambiar tu actitud depende sólo de ti y de todas las cosas que te hacen sentir culpable de tus propios males.
Lo mismo con culpar de todo a los demás (o al sistema, la mala suerte, las estrellas, las redes sociales, tus padres o la escuela).
No sirve de nada culparse o culpar a otros; lo más prudente y lo que mejor funciona es afrontar los problemas y, si tienen solución, intentar solucionarlos ya sea uno mismo o con ayuda. Recuerda que ser valiente no es no tener miedo, sino tener el coraje de afrontarlo.
Mientras
Mientras, si tienes que parar, para. Si puedes, dibuja, escribe a mano, toca música, modela, cose… haz cosas con las manos. Es muy importante alternar descansos con algo de actividad manual.
Y siempre que puedas sal de casa y camina.
Recuerda que eres inconformista. Ya sabes: “Lo contrario de la valentía no es la cobardía, sino el conformismo”, Robert Anthony
Marco Aurelio era emperador. Imagina a Christine Lagarde dando consejos de cómo tener éxito en la vida. En fin.
La vida tiene cosas súper bonitas, y si nos fijamos más en ellas que en las cosas chungas, pues estamos de mejor humor. Eso no implica negar las chungas, y quien lo hace se acaba dando una torta muy gorda (al menos es lo que yo he podido ver). Pero, y ahora hablo de mí, puestos a contarme mentiras sobre la realidad (porque no puedo abarcarla toda, mi cerebro filtra en base a diversos parámetros), prefiero contarme mentiras bonitas. Se me hace la mierda más llevadera.
Espero que esté mejor... Me encanta lo que escribes aunque sea triste. La tristeza también forma parte del mundo y negarlo solo hace que te explote en la cara. Ánimo
Y el plus del sonido bucólico del campo ha sido lo más 😂