Tienes una carta

de tu yo de hace unos años

Mi terapeuta me propuso un ejercicio:

Escribir una carta a mí mismo… de dentro de unos meses. Una carta a mi yo del mañana. Un mañana con fecha, algo concreto.

Lo que ella no sabe es que yo ya escribí sobre esto en mi newsletter de 2021. O sea, que es como si mi yo del mañana de 2021, o sea el de hoy, estuviera leyendo aquello.

Un puto lío.

---

Lo que decía mi yo de anteayer

La cosa es que puede ser muy útil escribirte a tu yo de dentro de un tiempo. 

Entiéndeme: útil de interesante, gratificante, revelador, emotivo.

No útil de cosas materiales, que hoy parece que algo solo es útil si sirve para obtener un provecho económico.

No: útil de intangible, de aprendizaje, de bienestar, de artístico.

El ejercicio es tan simple como escribirte algo para recibirlo dentro de cinco años, o veinte, seis meses, o cuando te dé la gana. Pasado ese tiempo, leerlo y flipar (o no).

Cómo carajo…

Supongo que sabes que en Google puedes programar emails. Es tan simple como escribir un correo y, en vez de enviar, darle a “programar envío” y elegir una fecha. Te hablo de Google porque es lo que conozco; en otros sitios no sé si también existe esta posibilidad.

También hay aplicaciones dedicadas justamente a esto. No me preguntes cómo, pero esta existe desde hace casi veinte años.

---

Para qué

Es normal escribir al yo del pasado: “hiciste lo que pudiste”, “no estaba en tu mano”, “perdona por no haber dejado de fumar antes”, etc…

Pero no es tan habitual escribirle al yo futuro. Para quizás darte cuenta de que los problemas de ahora no eran tan importantes, o que eras demasiado optimista en aquella relación, o que, efectivamente, lo de la IA realmente iba en serio.

O, sencillamente, ver que lo hicimos tan bien como sabíamos.

Sea como sea, el hábito de escribir siempre es una buena práctica, y al recibirla te darás cuenta de que antes no redactabas tan bien como ahora.